En la primera parte de esta nota se dio a conocer cuáles eran lo panes más comercializados en las calles limeñas y se colocó una tabla con el valor nutricional de cada sánguche. En esta segunda parte se desarrollará de manera más detallada los pros y contras de cada uno. De manera general se podría decir que los sánguches más sanos y nutritivos son el de palta, el de queso fresco, el de huevo frito y el de pollo, sin embargo, cada uno de ellos tiene ciertas recomendaciones que se deberían tomar en cuenta.
1. Pan con palta: la palta es ampliamente reconocida por su indiscutible valor nutricional, destacando su aporte de "grasas buenas"(omegas) que ayudan a prevenir enfermedades del corazón; además de que contiene vitamina E, que es un poderoso antioxidante y protector de las membranas celulares; caroteno o pro vitamina A, potasio, fibra, entre otros. Se debe tener cuidado con las cantidades que se consumen, ya que lo recomendable es consumir de 1/3 a 1/2 palta por día (dependiendo del tamaño de ésta), de lo contrario podría pasar de ser saludable a ser perjudicial. Recuerden que todo en exceso es malo. También se recomienda no agregar mucha sal (la cantidad de sal que se recomienda en TODO el día es 1 cucharadita).
2. Pan con queso: como se puede observar en la tabla del post anterior, este sánguche es una buena opción porque no aporta muchas calorías, tiene un buen contenido proteico y es uno de los que menos grasas aporta (lo cual no significa que tenga poca grasa). Además el queso es una excelente fuente de calcio, mineral muy importante en todas las etapas de la vida. Cabe recalcar que no todos los quesos son iguales, diferenciándose dos grupos principalmente: los de alto contenido de grasas y los de poco contenido de grasas (magros). Por supuesto lo recomendable es consumir los del segundo grupo, como por ejemplo el queso fresco o requesón. Personas que sufren de colesterol alto es preferible que eviten el consumo de queso en general o en todo caso disminuyan su consumo.
3. Pan con huevo frito: muchos expertos aseguran que el huevo es el alimento más nutritivo después de la leche materna. Dentro de sus tantas propiedades destacan la cantidad y calidad de sus proteínas, su aporte de vitaminas y minerales, la presencia de compuestos beneficiosos para la salud, como la luteína y zeaxantina (antioxidantes) y la colina (desarrollo cerebral y nervioso), entre otros. Sin embargo, es importante tener cuidado con la forma en que se prepare. Lo ideal es consumirlo cocido ("huevo duro") o escalfado, nunca crudo, y si se va a freir que sea con poco aceite. En la mayoría de puestos que he visto se vende el pan con huevo frito, y en este caso no podemos controlar la cantidad de aceite que se usa, entonces recomendaría que antes de consumirlo utilicen una servilleta o papel toalla y traten de quitarle la mayor cantidad de grasa que sea posible. Lo recomendable es consumir de uno a dos huevos diarios, y al igual que en la palta hay que tener cuidado con la cantidad de sal que se le agregue.
4. Pan con pollo: esta opción es una de las mejores por su alto contenido en proteínas y bajo aporte de grasas. Sin embargo, hay que tener cuidado con los "agregados" como son las papas al hilo y las salsas que se le echan. Lo recomendable sería consumir solo el pan y el pollo, pero sé que muchas personas no lo consumirían así (me incluyo). Para eso podemos elegir "agregados" más saludables, como por ejemplo, reemplazar las papas al hilo por tomates en rodajas, pepinos o lechuga y si desean agregar alguna salsa pueden optar por un poco de ketchup o mostaza.
Otras opciones también pueden ser consumidas de vez en cuando, como el pan con relleno que es rico en hierro y proteínas pero aporta cantidades moderadas de grasa saturada; o el pan con butifarra que también tiene un buen aporte proteico pero que contiene aditivos como los nitritos y nitratos que son utilizados para la elaboración del jamón y se sabe que pueden ser cancerígenos si son consumidos con frecuencia.
Por último, es importante mencionar que estas recomendaciones son generales, ya que cada persona tiene diferentes necesidades nutricionales, dependiendo por ejemplo del trabajo que realiza (oficina, obra, etc.), si practica algún deporte o si tiene alguna enfermedad (diabetes, hipertensión, etc.).
Fuentes bibliográficas:
Blanco de Alvarado-Ortiz, Teresa. Alimentos, Bromatología
http://www.consumer.es/alimentacion/aprender-a-comer-bien/alimentos-funcionales/tipos/lacteos/04-06.php
http://www.rpp.com.pe/2011-10-14-el-dia-mundial-del-huevo-noticia_412731.html
Muy interesante, gracias por tus aportes.
ResponderEliminarMe gustaría que nos orientes sobre las loncheras en los adolescentes, soy docente y trabajo en un colegio femenino, y queremos proponer loncheras saludables...que nos recomiendas...gracias